Nuestro neuropsicólogo explica qué puede aportar al tratamiento de este trastorno desde su especialidad
El trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH) es un trastorno del neurodesarrollo de origen neurobiológico, caracterizado por la presencia de uno o más de las siguientes dificultades: problemas atencionales, impulsividad e hiperactividad. El TDAH tiene un carácter crónico, y sus inicios suelen darse antes de los 7 años, por lo que es necesario estar atentos a las señales que pudieran indicar su presencia.
Dicho esto, cada niño o niña con TDAH, presenta un perfil cognitivo diferente, y los síntomas suelen variar en intensidad. Dentro de la categoría de trastornos del neurodesarrollo, es uno de los que mayor incidencia presenta, ya que en nuestro país según los últimos datos, su valor oscila entre el 4% y 7% del total de la población infantil. Las alteraciones cognitivas, conductuales y emocionales, presentes en niños y niñas con TDAH, suelen traducirse entre otros aspectos, en: necesidad imperiosa de moverse, reacciones emocionales intensas, problemas para llevar a cabo trabajos grupales, dificultades para respetar los turnos, ser descuidado y olvidadizo, conflictos con sus iguales, grandes dificultades para mantenerse concentrado en una tarea o entender bien unas instrucciones.
Por otro lado, es muy importante llevar a cabo su abordaje desde la infancia, ya que de no ser tratados, los problemas comentados con anterioridad, pueden evolucionar y progresar en la adultez, conduciendo a: problemas para la autogestión personal y el autocontrol emocional, deterioro en las relaciones de pareja y sus relaciones sociales motivadas para la impulsividad y el limitado autocontrol, incapacidad para dar respuesta a diferentes demandas del día a día, dificultades para mantener un puesto de trabajo, o problemas de autoestima. Todo ello, suele incrementar la probabilidad de sufrir trastornos anímicos o de ansiedad comórbidos, incluso desembocar en consumo de sustancias.
Tratamiento en la consulta de neuropsicología
En cuanto a su tratamiento, además del tratamiento farmacológico prescrito desde el servicio de pediatría y/o neurología, que es necesario en un gran número de pacientes, desde la neuropsicología se diseñan sesiones adaptadas a cada paciente y perfil cognitivo. En estas sesiones, se emplean diferentes técnicas de estimulación cognitiva, cuyo objetivo es la mejora de los déficits cognitivos, como los evidenciados en el sistema atencional o en los procesos ejecutivos, y la reducción de la intensidad de la sintomatología asociada. Así mismo, se emplean técnicas cognitivo-conductuales, enfocadas en el tratamiento de problemas emocionales y comportamentales. Además, se hace participes a los padres durante todo el proceso, dotándoles de toda la información imprescindible sobre el trastorno y el proceso terapéutico, y se les facilita pautas conductuales que le ayuden con las diferentes situaciones que se puedan generar.
Recuerde que puede solicitar su cita a través del portal del paciente de nuestra APP o página web. También puede hacerlo llamando al 854 566 003.