El 13 de junio se celebra el Día Europeo de la Prevención contra el Cáncer de Piel para concienciar sobre la importancia del cuidado y precaución
Ya que el factor de riesgo más importante para su desarrollo, es la radiación del sol, desde el Servicio de Dermatología de HSA creemos que es necesario conocer los riesgos derivados de la exposición solar para poder modificar determinadas conductas.
Para empezar y poder comprender mejor el peligro que implican las quemaduras solares vamos a comenzar explicando los tres grados de quemaduras que existen:
- Primer grado: Afectan solo a la capa externa de la piel. Causan dolor, enrojecimiento e hinchazón. Es la forma más leve
- Segundo grado: afectan también a la capa subyacente de la piel y se suelen manifestar con ampollas además de todo lo anterior.
- Tercer grado: No se producen por exposición al sol. Afectan a las capas más profundas de la piel y suelen requerir incluso injertos cutáneos para su curación.
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¿Qué relación tienen las quemaduras con el cáncer de piel?
El cáncer de piel aparece en las zonas más expuestas al sol como son el cuero cabelludo, cara, labio inferior, orejas, cuello y escote, brazos, manos, piernas y espalda.
Una quemadura de segundo grado ocasionada en la niñez o adolescencia aumenta doblemente el riesgo de desarrollar cáncer de piel. De hecho si una persona ha tenido 5 o más quemaduras de segundo grado durante su vida duplica el riesgo de melanoma. Los otros dos tipos de cáncer de piel relacionados con la exposición a las radiaciones ultravioleta son el carcinoma basocelular y el carcinoma espinocelular. Para poder distinguirlos es imprescindible acudir al dermatólogo ya que cada uno de ellos tiene un tratamiento y pronostico diferente.
Signos y síntomas de las quemaduras solares:
- Hinchazón
- Piel enrojecida con dolor
- Ampollas en el caso de quemaduras de segundo
- Insolación ( que se manifiesta con dolor de cabeza, fiebre, nauseas y fatiga)
- Molestias oculares
Los signos y síntomas de las quemaduras por la luz ultravioleta suelen aparecer a las pocas horas de la exposición, alcanzado su máximo en 12 o 24 horas. En todos los casos es importante saber que, aunque los síntomas desaparezcan en unos días, el daño en la piel permanece. La piel tiene memoria y cada quemadura solar provoca un daño en el ADN de la célula cutánea afectada por la quemadura.
Factores de riesgo
- Vivir en zonas con sol, cálidas o de mucha altitud
- Trabajar al aire libre
- Tener la piel clara, ojos azules y cabello rubio o pelirrojo
- Exponer la piel a la radiación UV sin protección
- Tomar medicamentos fotosensibles
¿Cuándo consultar al dermatólogo?
- Cuando hay hinchazón
- Aparición de ampollas
- Signos de infección
- Si no mejora en pocos días
Complicaciones si no consultamos con el dermatólogo
- Envejecimiento prematuro de la piel
- Lesiones precancerosas que se manifiestan en zonas que suelen tener daño solar. Se denomina queratosis actínicas a la larga se pueden derivar en carcinoma de piel
- Cáncer de piel: las quemaduras alteran el ADN de las células cutáneas sobre todo si se producen en la infancia o la adolescencia, apareciendo luego estos tumores de forma más frecuente en pacientes adultos
- Daño ocular
¿Cómo podemos prevenir las quemaduras y por tanto el cáncer de piel en la mayoría de los casos?
- Evitando la exposición solar en las horas centrales del día
- Cubriendo la piel con ropa y aplicando una buena cantidad de protector solar con filtro alto ( SPF 50+) y reaplicándolo cada dos horas
- No utilizar cabina rayos UVA
- Usar gafas de sol
- Y por supuesto consultando con su dermatólogo ante cualquier cambio o aparición de una lesión nueva
Puede solicitar su cita de dermatología con la Dra. Begoña Lasanta y la Dra. Elena Ginés a través del portal del paciente de nuestra página web o APP.