El Dr. Víctor Núñez, Otorrinolaringólogo de Hospital San Agustín, nos explica en qué consisten y cómo las trata en su consulta
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RINITIS ALÉRGICA
En estos días primaverales que vivimos, cuando los pacientes alérgicos comienzan a tener problemas por la concentración de alérgenos en el ambiente, es buen momento para hablar de una de las patologías más prevalentes en esta estación, la rinitis alérgica.
El término rinitis se utiliza para describir un trastorno que cursa con inflamación de la mucosa nasal y da lugar a síntomas como obstrucción nasal, estornudos, rinorrea y prurito nasal.
La rinitis alérgica (RA) es una enfermedad muy común en todo el mundo, entre el 10 y el 25% de la población mundial la padece. Estos pacientes además de los síntomas característicos pueden presentar una morbilidad significativa con alteraciones del estado de ánimo, astenia, alteraciones cognitivas… con la consiguiente pérdida de productividad laboral y social.
La RA se subdivide en 3 tipos: Estacional (RAE), Perenne (RAP), Laboral (RAL).
La RAE se produce por el polen, la RAP por la exposición a alergenos en lugares cerrados (ácaros del polvo, hongos del domicilio…) y la RAL por exposición a alergenos inhalado en el lugar de trabajo (cromo, níquel, madera…).
El tratamiento de la RA se realiza con corticoides tópicos nasales, antihistamínicos tópicos y sistémicos, corticoides sistémicos y finalmente tratamiento quirúrgico,
El síntoma más molesto y significativo de la RA es la obstrucción nasal, con la consiguiente dificultad para la respiración y se produce por un aumento del tamaño de los cornetes nasales (rinitis hipertrófica), que impide el flujo adecuado de aire. Esta rinitis hipertrófica se trata actualmente de forma quirúrgica, mediante una sencilla técnica endoscópica, que realizamos a diario en nuestro hospital, utilizando radiofrecuencia o ultrasonidos como energía para reducir el tamaño de los cornetes.
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SINUSITIS
La sinusitis y la rinitis coexisten en la mayoría de los individuos, por lo que en la actualidad se considera que el térmico correcto para denominarlas es el de rinosinusitis.
Es un cuadro que cursa con inflamación de las fosas nasales y senos paranasales caracterizada por la presencia de estos síntomas: obstrucción nasal, secreciones nasales (rinorrea), dolor o presión en la cara y a veces, pérdida del olfato.
No hay una relación clara demostrada por estudios prospectivos que establezca relación entre la alergia y la frecuencia de sinusitis, aunque si sabemos que el edema de la mucosa del complejo osteomeatal producido por la alergia, favorece la obstrucción y retención de secreciones en los senos paranasales.
Existen 2 tipos de sinusitis: la aguda, que tiene síntomas menos de 12 semanas, causa sobre todo por infecciones víricas, y la crónica, que dura más de esas 12 semanas, suele desarrollar formación de pólipos, está causada por infecciones bacterianas y hongos, afectando en gran medida a la calidad de vida del paciente.
El diagnóstico de la sinusitis se realiza mediante la exploración en consulta con rinoscopia, fibroscopia flexible y las pruebas de imagen (TAC y Resonancia magnética).
El tratamiento de la sinusitis aguda se realiza con lavados nasales, corticoides nasales, descongestionantes nasales, antihistamínicos y en determinados casos antibióticos y corticoides sistémicos. Las sinusitis crónicas se tratan de forma similar, utilizando corticoides sistémicos y antibióticos en más ocasiones y sin con el tratamiento médico no se consigue la resolución del cuadro clínico, se recurre a la cirugía para mejorar la ventilación y el drenaje de los senos para nasales.